"Que no haya nada en tí que no sea lo que de tí se espera" (San Juan María Vianney)

jueves, 17 de diciembre de 2015

EL SECRETO DE LA NOVENA DE NAVIDAD



No cabe duda de que las tradiciones navideñas tienen un “no sé qué” de especial que nos cautivan. Quizás sea el recuerdo de la infancia golosa que se regocija pensando en los dulces navideños, el chocolate y otros obsequios al paladar, que suelen siempre ser parte de estas fiestas. También, de seguro, hacen parte de esas memorias el canto de las posadas y la infaltable Novena.


Hoy en día es esa misma Novena la que se está convirtiendo poco a poco en un secreto estratégico
Para la evangelización. Quien se iba a imaginar que una tradición hogareña podría llegar a integrarse no sólo en los centros educativos, sino hasta en las oficinas. Justamente ahí donde el trajín del trabajo impide a muchos recordar a Dios, la Novena se ha infiltrado y comienza a dar sus primeros frutos.

El sólo hecho de que durante 15 o 20 minutos durante nueve días los compañeros se reúnan para meditar un pasaje del Evangelio, cantar algunos villancicos y rezar al Niño Dios, es ya un pequeño milagro. De esa pequeña iniciativa podrían nacer luego sinceros deseos de reconciliación (con Dios y con el prójimo), ganas de retomar el cuidado de la vida espiritual, de volver a la Iglesia, etc.

Así que aunque les parece poquita cosa, más nos vale no despreciar este poquito de levadura que, bien mezclada en la masa, puede llegar a producir grandes frutos. Organicemos y promovamos esta sencilla tradición que ha sido y seguirá siendo una excelente herramienta secreta para llevar al hombre de hoy de regreso a Dios.

Hasta el Cielo.

P. César Piechestein
elcuradetodos... ustedes