Del chancho caído todos quieren hacer salchicha - Septuagésimo Cuarto Informe Cesarial

Mis comilones ALA:

Muchos creen que los ecuatorianos comemos mucho, pero no tienen idea de como comen los italianos. En todo caso el tiempo de la comida es siempre un tiempo para compartir. Lástima que cada vez nos queda menos tiempo para sentarnos alrededor de la mesa y compartir en familia. Muchos se lamentan de que la casa es cada vez menos hogar y más hotel, donde cada uno hace su vida. Creo que en eso mis amigos italianos nos dan una buena lección. Por acá, aún hoy en día, el tiempo de comer es tiempo de alegría compartida y de comunicación.

Costumbres del campo

Nuestra vida está entretejida de costumbres y tradiciones. Mis amigos de la parroquia, siendo un sector rural, tienen muchas costumbres del campo. El ritmo del cultivo, la siembra, la cosecha, todo tiene su tiempo exacto. En septiembre y octubre la cosecha de la uva y la fabricación del vino. Luego la cosecha de la aceituna y la preparación del aceite, la poda del árbol, etc. En enero son los cerdos los que la pasan muy mal. Las familias tienen por costumbre matar al animalito en el mes más frío y así con la ayuda del clima poder preparar los embutidos.

Todo un acontecimiento

Y es que la muerte del marrano (casi siempre de respetables medidas) implica la participación de toda la familia y a veces hasta de algún vecino. En un sólo día, eso sí desde muy temprano en la mañana, casi toda la carne se convierte en salchichas o prosciutto. Todos colaboran en la faena. Unos preparan la carne, cortándola en pedazos pequeños, otros preparan el tripaje para las salchichas, otros muelen la carne, etc. Las partes más importantes, es decir, las patas y el lomo, se colocan en recipientes con mucha sal, porque así comienza el largo proceso que les llevará a convertirse en el tan delicioso prosciutto. Lo que más trabajo da son las salchichas que luego de ser rellenadas y amarradas, quedan colgando para secarse.

Chancho crudo !!!

Hasta ahí la cosa la tenía clara. Pensé que luego las ahumaban o algo así, pero nada que ver. Con la sal y el tiempo al aire basta. Pocos días más tarde están listas para comer. Yo recién me enteraba de que hace rato que estoy comiendo cerdo crudo. Uno acostumbrado al hornada, a la fritada y hasta a hervir o freír las salchichas, viene a degustar el animalito al natural. Claro que al final no está tan crudo, pero tampoco es que lo hayan cocinado. Igual siempre son sabrosas las salchichas de la parroquia.

Y el cuerito ???

Esa fue la pregunta que hice a continuación. Poco se hace con él. Sin embargo y para darme el gusto prepararon un poco guisadito con unos pedazos de costilla. Estaba muy sabroso, aunque no tanto como un cuerito reventado de esos que se pueden comer en Ecuador.

Aprendiendo a jugar a las damas

Francesco es un experto en jugar a las damas y al ajedrez. Es sobrino del padre Antonio y mariscal de la policía financiera. Cada sábado cuando llego para almorzar en la casa de los papás del padre, Francesco comparte también la mesa con nosotros. No conversa mucho, pero parece que el camino más fácil para hacer amistad era jugar a las damas (porque el ajedrez es para gente muy pilas y yo no lo soy). Así que tocó aprender a jugar y ahora, siempre después del almuerzo, nos pegamos una partidita. Así que ya me estoy preparando para cuando me jubile y me toque pasar las tardes en el parque. Para cuando llegue ese tiempo seguro que seré un master en damas.

Y ya son más de 20.000 las visitas !!!

Gracias a sus visitas y a las de muchos lectores de tantos países, el blog de elcuradetodos ha pasado las 20.000 visitas. Sus mensajes a través del correo y sus comentarios a las entradas del blog me animan a seguir escribiendo. Espero poder seguir contando con vuestro apoyo y amistad. Dios los bendiga siempre.

Hasta el Cielo.

P. César Piechestein

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