He recordado en estos dìas, un detalle gracioso de un viaje de misiones. Con dos de mis grandes amigos, David Brunis y mi queridìsima Ginger Villalà, nos fuimos a Chontal Bajo, un caserìo de apenas veinte familias, ubicado entre las provincias de Imbabura y Pichincha.
Visitando una hogar, mientras nos preparábamos para almorzar, agarrè uno de los cuyes que corrìan en el piso de la cocina. Claro que el animalito se retorcìa tratando de liberarse de mi, pues no estaba acostumbrado a semejante interacciòn con un ser humano. Pero no lo soltè (que bastante experiencia tengo con los animales) y decidì acariciarlo durante un buen rato. Poco a poco, ante la mirada estupefacta de mis amigos, el cuy se fue relajando, hasta quedarse quieto y manso sobre la palma abierta de mi mano. Ginger, ocurrida como siempre, decidìo que eso se llamarìa de ahì en adelante, la "Terapia del Cuy" y a continuaciòn sugiriò a quienes nomàs se la debìamos aplicar.
Valga la anècdota para ayudarme a compartir la reflexiòn de hoy. Ciertamente todos nos parecemos un poco a ese roedor. Mientras menos interacciòn autèntica hayamos tenido con los demàs, màs difìcil nos resulta lograrla. No cabe duda que un chiquillo que recibiò suficiente afecto de sus padres, serà una persona sana, que alcanzarà su madurez afectiva sin grandes dificultades. Lo que en caso contrario, serìa verdaderamente dificil. El afecto, manifestado con palabras, pero sobre todo a travès de la caricia, es algo insustituible en la persona humana, algo esencial para la armonia de su ser.
Es maravilloso encontrarse con esos pasajes del Evangelio donde leemos que Jesús tocaba a los enfermos, o cuando abrazaba a los niños y los ponìa sobre sus rodillas. El sabìa cuanto bien hace al hombre el contacto a travès del afecto.
Para mi , el abrazo, es la expresiòn màs patente del afecto. Es quizas el que expresa de forma màs total el sentimiento, porque acerca los dos corazones de quienes se abrazan. De hecho estoy convencido de que cuando entremos en el Cielo, Dios nos abrazarà como lo hizo el Padre Misericordioso con su Hijo Pròdigo.
Hoy los invito a abrazar con sinceridad y en abundancia, asì como a dejarse abrazar por Dios. No tengan miedo de expresar el afecto que llevan. Sepan que hay mucha gente que necesita un abrazo con urgencia y que el afecto tiene la ventaja de que al tiempo en que se da, tambièn se recibe. Abraza a tus amigos y lo seràn para siempre, abraza a tus enemigos y dejaràn de serlo.
Hasta el Cielo.P. Cèsar Piechestein
elcuradetodos... ustedes
P.D. : Aprovecho para agradecerles todos los abrazos que me han regalado, especialmente los de mi padre, que han sido abundantes. El me diò la idea de organizar "El Dìa del Abrazo". Hablaremos de eso màs adelante. Recibo cualquier idea o sugerencia para tal evento !!
Me ha gustado tu comentario.
ResponderEliminarCreo que yo debería ponerlo más en práctica y eso que muchas veces hablo del "abrazo que Dios nos dará en el cielo".
Gracias.
Ay Padre si está muy buena la idea, que tal el 12 de marzo jeje es mi cumple jeje bueno ya me pongo seria, si seria buena la idea mire por acá podría salir los de la parroquia y regalar abrazos o incluso decir Doy un abrazo por un centavo y eso destinarlo a una obra benéfica, no sé eso es algo que he querido hacer hace muhco pero no he contado con el apoyo de nadie aún. Usted diganos Padre y no dude que yo apoyo la idea. Ahhh por cierto yo le debo un abrazo ya que no estuve para la despedida.
ResponderEliminar30 DICIEMBRE ES EL DIA MUNDIAL DEL ABRAZO, LO ENCONTRE EN LA WEB =)
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